Qué hacer si eres migrante y sufres violencia doméstica de tu cónyuge ciudadano o residente
El estatus legal es la primera preocupación de los inmigrantes en Estados Unidos. No se trata solamente de la tranquilidad de poder trabajar y vivir sin preocuparse de las repercusiones de no tener papeles. Permite oportunidades de progreso tanto para el individuo como para su familia.
Una forma común en que muchas personas consiguen estatus legal es solicitando la green card por matrimonio. Las personas casadas con residentes legales permanentes o ciudadanos americanos pueden solicitar el estatus legal si cumplen con ciertos requisitos. Como todos los trámites migratorios, la solicitud se presenta ante USCIS.
Una característica de las peticiones de Green Card es que son presentadas por la persona que tiene un vínculo calificante con el migrante que busca la residencia. Es decir, no es el migrante quien solicita la Green Card por matrimonio, por ejemplo, sino que es su cónyuge quien tiene que presentar la petición en nombre del migrante. Lo mismo pasa con las Green Card familiares o las de empleo.
Las Green Card por matrimonio suelen otorgarse en primera instancia con ciertas “condiciones”. Es decir, le dan a la persona migrante una Green Card por dos años, y antes de concluir ese plazo deberá hacer el trámite correspondiente para quitar las “condiciones” de su Green Card y obtener la residencia “normal”, que tiene el vencimiento estándar.
Sin embargo, existen casos poco felices en los que la persona migrante sufre violencia doméstica por parte del cónyuge de quien depende su Green Card. Este tipo de situaciones son difíciles para el migrante en todo sentido. Desde el abuso experimentado en la relación, que puede ser físico o psicológico, hasta las complicaciones legales.
En reconocimiento a este tipo de situaciones, se creó en el año 1994 la Violence Against Women Act (Ley de Violencia contra la Mujer) que, pese a lo que sugiere el nombre, está destinada a ayudar a todas las víctimas de violencia doméstica, sin importar su género.
La ley VAWA tiene previsiones para ayudar a víctimas migrantes, sin importar su estatus legal. Una forma en la que lo hace es mediante las auto-peticiones de VAWA, informalmente conocidas como “Visas VAWA”. Mediante una auto-petición de VAWA, una persona migrante que sufre violencia doméstica por parte de su cónyuge ciudadano o residente permanente (u otros vínculos calificantes) puede solicitar la residencia por su cuenta.
Si una persona migrante está sufriendo violencia doméstica y se siente atrapada en esa situación por su estado migratorio, le recomendamos informarse acerca de cómo solicitar VAWA. Es importante contar con la ayuda de un abogado informado en el tema, porque la prioridad es cortar con el abuso doméstico sin comprometer el estatus legal de la persona migrante.
No siempre es necesario invertir dinero en un abogado para conseguir ayuda para la visa VAWA. Existen muchos recursos disponibles para las víctimas migrantes de violencia doméstica. Aconsejamos encarecidamente ser cuidadosos al momento de realizar averiguaciones – no es deseable que el victimario sepa que hay un interés en la visa VAWA, ya que podría tener repercusiones negativas para la víctima. Es importante cuidarse lo más posible para poder salir de la situación de violencia doméstica de la mejor manera.